Mosquitos. Una especie superior.

Ya sentimos todos, el fin de semana pasado, la ola de frío que pasó por la Península.

Pues yo el Domingo me fui a mi piso de Cartagena ya que tenía 3 exámenes esta semana. Cuando llego, por la noche, los termómetros de la calle marcaban 5 grados. Entro en mi piso. No tiene calefacción y hace muuucho frío. Brrr... Enciendo una estufa eléctrica. Dejo la maleta. Miro a la pared y veo.... ¿UN MOSQUITO? ¿Con el frío que hace? ¡Que cosa más rara!

Era uno de esos grandes y delgados, de lo que les puedes ver la probóscide (Esta palabra no es un insulto ni una oscenidad) ¿A que no sabías que se llamaba así? Jeje.

Es que, hay que ver. Con 5-6 grados de temperatura y el condenado está vivo. En fin, zapatazo y al suelo. Este no me pica esta noche.

Pero la cosa no acaba ahí. El miércoles me levanto por la mañana, entro al baño, y ahí están; dos seres voladores pegados al techo. Dos seres en cuatro metros cuadrados. En pijama, y aún estando el suelo muy frío, me descalzo. Cojo la zapatilla, escalo el retrete, y ¡paf! ¡paf! dos más al suelo.

Me ducho, salgo del baño. Entro en mi habitación... y.....¿adivináis? ¡OTRO!.
¡¡Me cago'n el p*** mosquito de los coj****!.

Pero el Sábado por la mañana tenía el último examen. La noche anterior, antes de irme a la biblioteca a darle el último repaso al temario, echo insecticida en mi habitación. Cierro la puerta y me voy. Si hay alguno morirá en ese rato.

Vuelvo a las 2 de la mañana con ganas de meterme en la cama y descansar. Me pongo el pijama. Me meto bajo las sábanas. Apago la luz. Cierro los ojos. Y....zzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzz.

¡AG! ¡NO PUEDE SER! Si hubiera alguno ¡DEBERÍA ESTAR MUERTO!

Me levanto, enciendo la luz. Lo oigo, pero no lo veo. Me siento como un soldado en el campo de batalla. Oyes al enemigo, sabes que está ahí, pero no le ves.
Me paso 10 minutos dando vueltas por la habitación, intentando encontralo pero no le veo.

Cojo el insecticida, echo por toda la habitación (y de un modo muy, muy generoso). A ver si así se muere de una puñetera vez.

Puag, puag!. Me salgo de la habitación para no ahogarme. Me voy al salón. Y lo oigo otra vez. El maldito zumbido en mi cabeza....zzzzzzzzzz.... Estoy loco. Se me ha metido el ruido en mi cabeza y no me lo puedo quitar. Ya sé. Si me tapo los oídos y lo sigo oyendo, es que el ruido está en mi cabeza. Total, son las dos y pico de la mañana, mañana tengo un examen, y estoy nervioso.
Me tapo los oidos. Dejo de oir el zumbido. Eso significa que el ruido no está en mi cabeza, ¡es real!.
Abro la ventana. En la puerta de mi casa hay obras y a lo mejor hay alguna maquina que se han dejado conectada y zumba un poco. Tras enfriarme la cara llego a la conclusión de que en la calle hay absoluto silencio. Eso es que están aquí los mosquitos. ¡Pero no los veo!.

Me doy la vuelta. Y veo a otro de ellos. El que estaba oyendo en el salón. Como no llego con la zapatilla le aplico directamente un buen chorro de insecticida directamente.
Empieza a moverse torpemente y cae. No llego a ver donde cae, pero está muerto (o al menos eso espero).

Decido volver a mi habitación. Son las 2:44 de la mañana. Aún se huele un poco al spray, pero me da igual. Yo tengo mucho sueño. Me meto en la cama. Y.... ¡LO OIGO ZUMBAR!.

Le oigo zumbar torpemente. Eso es que está muriendo. Pero siendo casi las 3 de la mañana y puesto que tengo que madrugar, me da igual. Cierro los ojos y me duermo.

Así terminé la noche. A punto de enloquecer por los supermosquitos que pululan por Cartagena y su capacidad de supervivenecia.

¿Qué pasará cuando llegue el verano? ¿Necesitaré construir refugios antiaéreos?. Y no, no es por que mi piso esté sucio y críen en él todo tipo de seres extraños.

El informe de bajas fue el siguiente:

Día: Domingo (noche)
Muertos: 1
Causa: Zapatazo

Día: Miercoles (mañana)
Muertos: 3
Causa: Zapatazo

Día: Viernes (noche)
Muertos: 2 (Desaparecidos)
Causa: Spray

La semana que viene, si no se rinden incondicionalmente y continúan los combates, publicaré el nuevo estado de bajas.